Tag Archives: niños

¡Ya empieza el cole!

7 Sep

Ya comienza el cole, no hay marcha atrás, el que todavía no lo tenga todo listo no tiene mucho tiempo para prepararse, volvemos otra vez a la batalla, al frío, a la rutina.

Pero para volver hay que hacer un desembolso importante, está muy bien esto de que por la educación de nuestros hijos lo que sea, pero en ocasiones me siento literalmente timada.

Para empezar hay que recalcar la arbitrariedad con la que cada colegio establece los libros de texto necesarios para llevar a cabo el curso, si ponemos como referencia primaria hay coles en los que se llegan a pedir unos 20 libros, y en otros 4 por que las demás materias las imparten con fichas. Y hablo dentro de la misma Comunidad Autónoma, que se supone, tienen el mismo programa.

Luego viene el nuevo formato de los libros, por que como el peso de las mochilas es perjudicial para los niños, en vez de plantear la posibilidad de pasearlos menos, las editoriales han visto el negocio y hacen un libro por trimestre, pero claro, la comodidad se paga y se paga en euros.

Por otro lado, y una de las cosas que peor me sienta es que los libros se han convertido en cuadernos.

Cuando yo estudiaba en el libro estaba la parte teórica explicada y al final de cada lección había unos ejercicios que hacía en un cuaderno dedicado a esa materia, por lo que el libro se quedaba limpio, de hecho no me dejaban pintar en un libro, eran para cuidarlos y que duraran todo lo posible.

Ahora los ejercicios se hacen en el libro, por lo que por mucho que lo cuiden ese libro ya no sirve para nadie más, así que aunque no cambien el proyecto y tengas alguien que pueda necesitarlo el libro se queda inservible.

Un tema que siempre me ha llamado mucho la atención de las editoriales es la facilidad para sacarse un nuevo libro de la manga, cogen el libro que ya tienen hecho, de la materia que sea, le añaden una foto, o la cambian de sitio o de tamaño y voilà ya hay libro nuevo, con nuevo ISBN y todo, y este caso lo he comprobado.

Luego llega el tema de los uniformes, y vuelvo a recordar mis tiempos, en mi época valía un polo blanco o un jersey azul o verde de pico, los podías comprar en cualquier sitio.

Pero ahora se ha puesto de moda poner el escudo del cole bordado en estas prendas, lo que supone que se reduce bastante los lugares en los que se pueden comprar y aumenta el precio.

Y no quiero entrar con el tema de material escolar, que yo creo que mis hijos salen de primaria con el material necesario para montar su propio negocio de papelería, que como están las cosas no lo descarto.

¡Así que con estas os deseo una muy feliz vuelta al cole!

P.D. Quisiera dejaros el texto de una nota informativa de un colegio, ya me contareis que os parece.

*   NOTA INFORMATIVA   – LIBROS DE TEXTO CURSO 2011-2011

Debido a un problema exclusivo de las editoriales y siguiendo un  criterio contrario a las recomendaciones enviadas por la Comunidad de Madrid a los centros escolares, las editoriales están cambiando los ISBN de los libros de texto correspondientes al curso 2011-2012, no los contenidos pero si el orden de los mismos, por ello este Instituto aceptará los libros de texto que se han utilizado en el curso 2010-2011, y cuya relación de libros está incluida en los sobres de matrícula de cada nivel educativo. No obstante en la página Web del centro aparecen todos los ISBN aceptados para cada una de las asignaturas en las que se ha producido estos cambios de libros.

Esto únicamente favorece a las editoriales que son las que desde su situación de poder y amparadas por las instituciones públicas no tienen ningún escrúpulo en actuar de esta manera, sin tener en cuenta la situación económica actual,  así como la labor que desempeña el AMPA  en el intercambio de libros, queda totalmente desprestigiada.

De la obesidad

27 Jul

Cada vez hay más bombardeo publicitario para que nos conservemos de maravilla, para que no pasen los años por nosotras, para que tengamos cuerpos esculturales, pero prácticamente todo este arsenal va dirigido a las mujeres, sin embargo, hace bien poco se publicó un estudio que desvela que más de la mitad de los niños españoles sufren sobrepeso.

Este es un problema en el que, desde casa, se deberían tomar medidas, por que a la larga puede ser peligroso para ellos. No estoy hablando que mantengan una dieta estricta, de hecho creo, que salvo casos clínicos, no solo es un problema la alimentación que tienen, que lo es, si no también la escasa actividad física que realizan.

Cada vez es más habitual encontrarse con niños en el parque con videoconsolas, móviles y aparatos varios y en vez de estar corriendo, jugando al fútbol o al pañuelo, se quedan apalancados en un banco con una bolsa de patatas al lado o una coca cola, y eso en el caso de que bajen al parque. Y de esto los padres somos directamente responsables.

Ojo, no tengo nada en contra de los videojuegos o de escuchar música, pero si de que se haga sin control, y no solo por el tipo de juego o de música, si no por el tiempo que se emplea en esta tarea.

También creo que puede estar relacionado con la dichosa conciliación, por que la reducción de jornada no es interminable, y justo se acaba en edades complicadas para los niños, con ocho o nueve años, muchos pasan las tardes solos, son ellos los que deciden en que van a emplear su tiempo, y, claro, muchos se pasan las tardes tirados en el sofá y mejor si se acompaña con un refresco y unos ganchitos.

Tampoco tengo nada en contra ni de los sofás, ni de los refrescos, ni de los ganchitos, pero no creo que un niño deba abusar mucho de ninguno de los tres.

Otro factor que creo que es importante, es que dado, que los padres cada vez están más ausentes, tampoco tienen demasiado tiempo para cocinar en condiciones a diario, por lo que muchas veces se tira de comida preparada, fritos, o de comer fuera de casa, mucho más a menudo de lo recomendable.

Pero merece la pena un esfuerzo más y preparar comidas algo más sanas.

No creo que los niños deban estar a dieta, ni tampoco que no jueguen a videoconsolas, ni que no tomen refrescos, pero si que creo que son elementos que se han introducido en nuestras vidas mucho más habitualmente de lo deseable.

No hay nada mejor para combatir la obesidad, que comer bien, con lo que me refiero a comer con calidad, una dieta sana y de vez en cuando un bollo, un pastel, o un refresco y salir mucho, jugar mucho, hacer deporte, cualquiera vale. Además el deporte ayuda a que hagan nuevas relaciones, que conozcan a otros niños, así que a la par tiene más vida social.

Sé que estoy generalizando mucho, y que hay casos y casos y hay mil motivos, sé que hay padres que sí se preocupan y que ya sea por problemas médicos, nerviosos, de constitución, no tienen fácil esta tarea, pero también sé que en muchos casos falta esta preocupación.

Les cuidamos cuando estan enfermos, les curamos cuando tienen una herida, nos preocupamos por sus notas, por sus deberes, bien pues tampoco debemos  pasar si sufren obesidad, por que puede llegar a ser un problema.

Del estrés

12 Jul

Hoy gracias a @madrescabreadas y a @djugodavila, me he enterado de la noticia de que la madres españolas vivimos estresadas, y no se queda ahí la cosa sino que somos las más estresadas de la UE, según este estudio afirman esta situación dos de cada tres mujeres, no está mal, pero creo que poco se va a hacer al respecto.

Ya sabemos todos como andamos respecto al tema de conciliación, creo que en esta cuestión nos venden lo que en realidad es una pura falacia, y ya no solo por la jornada laboral, que es un tema que me gustaría abordar por sí solo, si no por todo lo que nos rodea.

La idea que nos venden de mujer, de madre, de trabajadora, está tan idealizada que creo que produce un gran grado de frustración. Nos venden mujeres perfectas que practican yoga, trabajan, comen de manera saludable, atienden a la familia a la perfección, salen con los amigos, limpian la casa, hacen la compra, ayudan con los deberes y así podría estar hasta aburrirme.

Pero eso no es real, el día a día, por lo menos el mío, lo tengo que tener prácticamente cuadriculado, sobre todo en época escolar, y rezando para que no me surja ningún imprevisto, cosa por otro lado bastante difícil con tres niños, voy contando los minutos. Y yo, o lo hago así, o de verdad que no puedo, no doy a basto, necesito y creo que ellos también, cierta sensación de control. Y encima resulta que mi familia no es perfecta, no brillamos cuando tomamos un yogurt líquido y mis hijos no van de blanco inmaculado corriendo y riendo alegremente por un prado, resulta que tengo ojeras, no tengo tiempo de ir a hacer la compra todos los días, mis hijos, a veces, no me hacen caso, o se entretienen con una mosca, o deciden ir al baño justo cuando tenemos que salir de casa, o deciden discutir sobre de quién es el muñeco de turno.

Otro factor que creo que hay que tener en cuenta, es que de momento, muchas mujeres son las responsables, trabajen o no de lo que sucede dentro de casa, en esto parece que nos hemos topado con un bache que nos está costando pasar. Así que no solo tiene que trabajar, sino que cuando llega a casa, ya no es que tenga cosas que hacer, es que es responsable de hacerlas, que es diferente, por que aunque no lo parezca, el apoyo en las cuestiones de casa de una pareja colaboradora es fundamental, las cosas hay que hacerlas, pero tienes una persona para compartirlas, que se preocupa contigo y que se desenvuelve en tu mismo mundo, toma decisiones y comprende la situación, al final se convierte en compañero de estrés.

Y luego, por supuesto viene el tema económico, porque muchas mujeres, que tienen y quieren la opción de pedir una reducción de jornada, no pueden hacerlo por problemas económicos, lo que además puede añadir un problema emocional, por esa sensación que se tiene de no estar atendiendo a sus hijos todo lo que les gustaría, así que se acaban sintiendo culpables.

No hay que olvidar, que además el estrés, puede llegar a afectarnos físicamente, que es algo que cada vez ocurre con más frecuencia, por algún sitio tiene que salir.

Desde luego creo que estas estadísticas demuestran un problema de fondo en cuestiones de conciliación, me entristece pensar, que hoy va a ser una noticia comentada, un par de días a lo mejor, pero que al final no pasa nada, desde el poder nadie va a hacer nada. Ojala me equivoque.

El tiempo

5 Jul

Tener hijos cambia la vida, de repente hay una persona que depende de ti así que tu vida empieza a girar a su alrededor, dejas de poder hacer cosas que antes hacías, no puedes irte por ahí cada vez que te apetece, ni a la hora que te apetezca, de hecho hay cosas que dejas de echar de menos, que no necesitas.

Creo que en eso todos estaremos de acuerdo, sin embargo también creo que disponer de algo de tiempo para ti no está nada mal. No cambiamos de repente, no dejamos de ser hombres y mujeres, de tener amigos, de gustarnos una buena charla de adultos, de necesitar leer un libro, o un fin de semana a solas con tu pareja.

Está claro que varia mucho la disposición del tiempo libre, que tener hijos conlleva muchos sacrificios, y hay que estar dispuesto a hacerlos, pero no pueden impedir que sigamos desarrollándonos en los demás aspectos de nuestra vida, nosotros también seguimos creciendo y aprendiendo y no podemos quedarnos en casa encerrados todo el tiempo, o rodearnos siempre con las otras mamás del parque, que al final se convierten en amigas.

Siempre se puede sacar algo de tiempo, dejando a los niños una tarde con la pareja o con los abuelos.

Es difícil poder compaginarlo todo, pero vale la pena solo por sentir que todavía estas en el mundo, que no solo puedes hablar de bebés, de pañales o del cole.

Está bien sentir que no sólo eres madre, que también, si no que no has dejado de ser todo lo que eras antes, además lo ves todo desde un punto de vista diferente, no sé si más maduro, más relajado o más distante, pero diferente.

Porque ser madre es una experiencia maravillosa, es algo que te cambia la vida, y desde luego es la faceta más importante, a la que más tiempo, energías y esfuerzo dedicamos, o por lo menos debería ser así. Pero no es lo único que somos.

las piscinas

3 Jul

Hace poco se publicó una noticia sobre que unos familiares habían agredido a un socorrista por que la niña de cinco años se había tirado a la piscina sin protección. Y dentro de nada, por desgracia, saldrán más noticias de niños ahogados en piscinas, sobre todo privadas.

Y es que las piscinas aparte de divertidas y de ayudarnos a soltar nuestras energías y las de los pequeños, son peligrosas, no nos podemos fiar.

Yo lo que suelo hacer es meterme con ellos y si, en ese momento, no me apetece me siento en la orilla a vigilar, eso y llevarles a natación durante el invierno, para asegurarme, no tanto de que sepan nadar con una técnica impecable, si no de que se saben defender en el agua, de que saben flotar por lo menos.

A parte de las recomendaciones cotidianas sobre protección solar, cortes de digestión y no exponerlos a sol durante las horas de más calor, mi recomendación principal es la de no perder de vista a nuestros hijos cuando hay una piscina cerca, por muy pequeña que esta sea.

Ya ha llegado el verano, y con él llegan peligros extras, y está claro que no podemos atarlos para que no les pase nada, pero si que hay que educarles en los peligros, explicarles que les puede pasar y estar vigilantes.

Lo mismo pasa con las bicis, monopatines, patinetes y todos los vehículos sin motor. cada vez hay más coches y hay que estar al tanto de cada cruce por el que vamos a pasar.

No sé como lo hago, pero es llegar el verano y me salen ojos en la espalda, por que además los niños tienen un don especial para que, en los momentos en los que parece que nada les puede pasar, ellos se buscan las vueltas para desafiar todas las leyes físicas de este planeta desde la de la gravedad hasta la de la relatividad y hacerte dudar de su existencia.

Por que con ellos todas las precauciones son pocas, dejándoles siempre que investiguen el mundo, que se pongan a prueba a sí mismos, pero con el corazón en un puño.

Mentiras

28 Jun

Las mentiras, son una de las cosas que peor me sientan, están mal, de eso no cabe duda.

No me gusta que nadie me mienta, considerando las mentiras en cosas importantes, tampoco pido que me digan que no les gusta como voy o como tengo el pelo. Mucho menos me gusta que mis hijos me mientan y procuro hacérselo entender, intento que entiendan lo malo que es mentir y que tiene consecuencias.

Pero no me gusta menos mentir yo, creo que hay temas difíciles de enfocar, tipo sexo, teoría de la evolución, la guerra, la vida y la muerte o todos aquellos temas que resultan quizás demasiado complejos para ellos, dependiendo de la edad, así que con esos temas lo que hago es adaptarlos, pero no mentir.

El otro día me encontré a una madre que espera su segundo hijo, que le dijo a  la hija que ya tiene de 5 años que para tener hijos las mamas se van a la farmacia, compran una pastilla y así se quedan embarazadas, me sorprendió muchísimo ¿Es necesario contar ese cuento chino? ¿A fin de qué?

No discuto en que hay que obviar ciertas partes, en este tema como en muchos otros, pero llegar a esto me parece absurdo.

Me da la sensación de que hay veces en las que tratamos a nuestros hijos como si fueran tontos, y no lo son, no son adultos desde luego, y creo que está bien simplificar las explicaciones, pero de ahí a mentir de esa manera hay un mundo.

A medida que van creciendo puedes ir ampliando la información, por que hay cosas que no son fáciles explicar que requieren de ciertos conocimientos más complejos o en los que hay que tener cierta base de conocimientos a los que todavía, por edad y nivel de comprensión no tienen acceso. Pero creo que hay otros temas en los que somos los padres los que no estamos preparados para enfocarlos y muchas veces optamos por evasivas o mentiras en vez de hacer las cosas más sencillas.

Una cosa es que los niños crean en hadas y mundos imaginarios o que Superman existe y otra es que cuando te hacen una pregunta a la que ellos no encuentran respuesta abuses de su credulidad para contarles cualquier cosa.

Si una pregunta te sorprende en ese momento y no encuentras la respuesta, siempre puedes recapacitarla y explicárselo más tarde, cuando ya estés preparado y tranquilo.

Si lo que quiero conseguir es una relación de confianza con mis hijos y enseñarles que pueden confiar en sus padres, no creo que la mejor manera de empezar esa relación sea mintiendo, sobre todo en cosas en las que no hace falta.

De la tele

23 Jun

La televisión  de hoy se ha convertido en un aparato casi de primera necesidad, rara es la casa dónde no haya una o más, sin embargo no hacemos más que quejarnos de ella, de su contenido a ciertas horas, de los programas basura, del uso de temas y lenguaje inapropiado en horario protegido…

Cada vez se oye más que los críos saben quien es Belén Esteban, pero desconocen a personajes relevantes de la historia o de la vida actual.

No voy a ser yo la que defienda a estos programas, pero sinceramente supongo que alguna responsabilidad es de los padres, con no ponerlos hay suficiente, por que ya no es que emitan muchas otras cosas, es que además ¡tiene un botón para apagarla!

Cada vez hay más estudios sobre las horas que pasan los niños delante de la tele, sobre lo perjudicial que puede ser, cada vez hay más información de todo ¿Por qué no la usamos?

Además este problema no es que mejore mucho con los canales infantiles, dónde repiten hasta la saciedad las series de dibujos, pero no se molestan en hacer o emitir buenos programas infantiles, algo de cultura, música o concursos de calidad, desde luego es más fácil y barato repetir y tratar a los niños como idiotas, bueno a los niños y a los adultos.

Tampoco quiero renegar de la tele, es como todo, en su justa medida es un buen instrumento, pero hay que usarla con mesura, con responsabilidad, todos sabemos lo que hay, tampoco engañan a nadie que no quiera, pero si que hay que saber quién tiene el mando en este tema, yo elijo qué canal pongo, qué les dejo ver, por que tampoco valen todos los dibujos, la verdad, y elijo cuando se acaba. Hay mil cosas que pueden hacer.

A mi me gusta ver y conocer que ven mis hijos, si es adecuado, si lo pueden entender, de momento no queda otra por que no estoy por la labor de fiarme de los programadores, ni de aparcarlos ahí para que estén callados y quietos, la tele no es una niñera.

Así que desde aquí, mi consejo es que vean la tele, pero lo justo, y que sepamos siempre que están viendo, por que por desgracia, sea la hora que sea no te puedes fiar de ella.